Ordenar la biblioteca permite conocer los libros que tenemos, facilitar su consulta y darle un propósito a la colección. Sin embargo, una cosa es ordenar una biblioteca personal o familiar, y otra muy distinta, una biblioteca pública o institucional.

La mayoría de las bibliotecas públicas e institucionales cuentan con softwares especializados que posibilitan la búsqueda del material que necesitamos; pero, ¿qué pasa cuando queremos darle a nuestra biblioteca un orden más técnico y no contamos con esa tecnología? ¿Qué podemos hacer si necesitamos diseñar un sistema para clasificar la colección física?

Hoy te compartimos algunos tips para pensar y crear tu propio sistema de clasificación acorde con los intereses y el contexto de la biblioteca, bien sea personal, familiar, parroquial, popular o comunitaria. ¡Ponle un toque de recursividad e ingenio! Esta labor puede ser un poco dispendiosa, pero verás que valdrá mucho la pena, pues además del orden, podrás reconocer la necesidades y fortalezas de tu biblioteca.