Destinitos Fatales de Andrés Caicedo: el manifiesto de una mente atormentada

Lo han considerado como uno de los pocos escritores malditos colombianos, y no es para menos, porque la brillantez de Andrés Caicedo siempre estuvo propulsada por el dolor ciego que causa la incomprensión y la incertidumbre.  

En Destinitos Fatales, una recopilación de los escritos desperdigados en la habitación de este caleño, que fue una estrella fugaz para el arte colombiano, se refleja el alma intranquila que habitó las calles de la sucursal del cielo entre las décadas de los 60 y 70. En este libro encontrarás personajes condenados a sus manías, a su ciudad y a esa visión aterrada ante la fealdad que habita tanto en el privilegio como en la pobreza, tanto en la juventud del cuerpo, como en el hastío del espíritu. 

Estar frente a Destinitos Fatales es estar frente a una colección de cuentos que exudan juventud, pero una juventud manchada por reflexiones turbias, dolorosas y poderosamente reveladoras. Con este paisaje tan gris, ¿vale la pena leerlo? Sí, siempre y cuando estés listo para una perspectiva amarga de país y vida, siempre y cuando tengas el buen juicio de reconocer el valor literario y casi que filosófico de esta lectura. 

Otros recomendados: